bienvenido a mi historia

María Alejandra Sánchez

A veces siento que ser emprendedora y mamá es como ser la directora de una película donde el guion se escribe a medida que avanzamos. Antes de que mi pequeña Mia llegara, pasaba mis días rodeada de impresoras 3D y proyectos, soñando en grande. Pero ser mamá ha añadido una nueva capa de caos y belleza a mi vida. Quiero compartir contigo cómo he navegado por esta locura, los altibajos de emprender, y las risas que se encuentran en medio del desorden. Así que, si alguna vez te has sentido un poco perdida en este viaje de ser mamá y emprendedora, estás en el lugar correcto. ¡Vamos a descubrirlo juntas!

Un sueño de emprendimiento, familia y crecimiento

¡Hola! Soy María Alejandra Sánchez, mamá de Mia (y muy pronto de otro pequeño ), diseñadora industrial, especialista en gerencia de mercadeo, y una apasionada del emprendimiento. Quiero contarte cómo, entre impresoras 3D, noches de desvelo y mucho trabajo, he construido mi propio camino.

Todo comenzó en Bogotá, Colombia, cuando en 2012 me gradué como diseñadora industrial y abrí mi primer emprendimiento junto a mi novio (hoy esposo ♥) en un pequeño local en Chapinero. Así nació Prototype 3D: un local apenas pintado, con una sola impresora 3D y toneladas de sueños. Nos lanzamos sin mucha experiencia, pero con la convicción de salir adelante. Con el tiempo, añadimos servicios de corte láser y comenzamos a apoyar a estudiantes de diseño y arquitectura, un trabajo que aún recuerdo con mucho cariño. De ese esfuerzo surgió lo que luego se convertiría en Fabriteca y, más tarde, en Todo Láser y 3D, una empresa hecha a pulso que refleja mi amor por crear y compartir.

Para 2018, nuestro proyecto había crecido: con más colaboradores y una nueva sede que llamamos Fabriteca, un espacio de 250 metros donde otros creadores podían alquilar nuestras máquinas y trabajar en sus ideas. Fabriteca se transformó en un verdadero espacio de comunidad creativa. Sin embargo, como a muchos, la pandemia en 2020 nos obligó a cerrar ese capítulo, una despedida difícil y nostálgica. Decidimos transformar Fabriteca en lo que es hoy Todo Láser y 3D, enfocándonos en productos 100% hechos por nosotros. Fue así como exploré uno de mis grandes sueños: crear productos propios. Hasta entonces, nos habíamos concentrado en ofrecer servicios, pero este nuevo mundo me encantó. Comenzamos ofreciendo los productos a través de redes sociales y con pautas pagas, ¡y resultó ser un éxito! Tanto que el flujo de mensajes fue creciendo hasta que los días se me iban solo en responder. Ahí fue cuando vimos la necesidad de implementar una tienda en línea donde las personas pudieran comprar directamente.

Esa experiencia fue tan nueva y desafiante que, para finales de 2020, decidí buscar capacitación en logística para aprender a hacer crecer nuestra tienda online. Encontré un curso fascinante de Supply Chain and Management en Vancouver, Canadá. Mi esposo y yo lo discutimos y decidimos intentarlo, ya que no solo significaba un crecimiento personal, sino también laboral. Sin embargo, el destino nos tenía otros planes: aplicamos para la visa y fue rechazada; lo intentamos una segunda vez y nuevamente la respuesta fue negativa. El destino nos decía que por ahí no era, así que dejamos de lado la idea de Canadá y continuamos nuestro camino en Colombia, sin saber que esa aventura solo estaba pospuesta.

Canadá y una nueva aventura en familia

En 2021, la vida nos volvió a poner el nombre de Canadá enfrente, pero esta vez de una manera distinta. Mi esposo encontró una oportunidad para hacer una maestría en Québec. En ese proceso, descubrimos que estaba embarazada, ¡y ahí cambió todo! En febrero de 2022, llegamos a Canadá, con ocho meses de embarazo y muchas ilusiones. Días después, nació Mia, y nuestra familia comenzó una nueva etapa, llena de retos y alegrías. Sin embargo, esta etapa también trajo consigo desafíos personales: me enfrenté a la depresión post-parto, una experiencia compleja y difícil que cambió mi vida. Delegué el manejo de Todo Láser y 3D y me enfoqué totalmente en mi recuperación y en ser mamá.

Cuando Mia tenía cinco meses, nuestros ahorros empezaron a agotarse, y mi esposo y yo decidimos que era momento de buscar ingresos. Intentamos encontrar un lugar donde pudiéramos fabricar nuestros productos de corte láser aquí en Canadá. Pero el destino nos tenía otra sorpresa: en lugar de salir con un proveedor, salí con un empleo nuevo. Ahí conocí a Patrice, alguien que siempre consideraré un ángel en mi vida. Patrice era un hombre maravilloso de 84 años, originario de Québec, que me ofreció un trabajo donde podía llevar a Mia conmigo, trabajar medio tiempo desde casa, e incluso una camioneta para moverme.

Patrice solo hablaba francés, y yo apenas entendía, pero fue tan generoso que contrató a una traductora para ayudarnos a comunicarnos. Siempre buscaba resaltar mi trabajo; con su inglés básico me decía «Good job», palabras que llevo con cariño en el corazón. Además, me ofreció la posibilidad de crear una sociedad con él. Nos apoyó en todo, y fue un ejemplo de bondad y confianza. Cinco meses después, Patrice partió de este mundo, dejando un gran vacío en mi vida, pero también una enorme enseñanza sobre la generosidad y el apoyo.

El nacimiento de mas.mariale

Con el tiempo, Mia empezó la guardería, y sentí que era el momento de volver a mis proyectos, pero con un propósito distinto. Me di cuenta de que quería ser independiente, crear desde el corazón y compartir mi experiencia con otras mamás. Así nació mas.mariale, un espacio donde hablo de lo que más amo: emprendimiento, Canadá, y maternidad.

Aquí en masmariale.com, encontrarás recursos gratuitos, tips de negocio, y herramientas para otras mamás que, como yo, están viviendo el reto de equilibrar la vida familiar y profesional en un país nuevo.

Hoy, estoy a punto de darle la bienvenida a nuestro segundo bebé y no puedo evitar sentirme agradecida por cada paso de este viaje. He aprendido que las mamás podemos con todo, incluso cuando dudamos. Así que, si estás aquí buscando inspiración, compañía, o simplemente un recordatorio de que no estás sola, bienvenida. A veces, el camino puede ser difícil, pero cada día es una nueva oportunidad de crear algo hermoso.